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Las necesidades domésticas de calefacción y agua caliente sanitaria (ACS) deben estar bien cubiertas. Las calderas de condensación se presentan como los aparatos ideales para lograrlo equilibrando el ahorro y el confort. Sigue leyendo para descubrir las razones por las que apostar por estos equipos.

Calderas de condensación eficientes e inteligentes

De todas las calderas de gas, las de condensación aprovechan al máximo el calor latente generado durante la combustión. Alcanzan clases energéticas muy elevadas (A+) y, con rangos de modulación amplios (hasta 1:12) evitan encendidos y apagados innecesarios.

Hay calderas equipadas con un sistema de combustión inteligente llamado Gas Adaptive. Estos equipos se adaptan a las fluctuaciones de gas y aire, de modo que la combustión es siempre óptima.

Tanto los rangos de modulación elevados como la tecnología Gas Adaptive fomentan el ahorro de gas. Y esto, a la hora de proveer de calefacción y ACS a una casa, siempre es conveniente para el bolsillo.

Calderas de condensación para un confort óptimo

El ahorro en la factura energética es una ventaja evidente de las calderas de condensación. Pero ¡no nos olvidemos del confort! Para que una caldera sea perfecta debe conjugar ambos aspectos.

En este sentido, es aconsejable elegir modelos con sistema de microacumulación y el máximo confort en la producción de ACS. Si quieres tenerlo en cuenta en tu próximo aparato, asegúrate de que disponga del certificado de 3 estrellas (EN 13203).

Y, hablando de confort, no podemos obviar lo desagradable que es una caldera ruidosa. Por suerte, hay modelos muy silenciosos que emiten solo 45 dB. ¡Casi no se distingue el sonido de la caldera mientras está en funcionamiento!

Calderas de condensación más sostenibles

El factor medioambiental es otra de las razones por las que se aconseja utilizar calderas de gas de condensación. Es la manera de disfrutar de un suministro de calefacción y agua caliente más sostenible.

Los equipos más amigables con el planeta son las calderas de clase 6 (EN 15502-1). Estos equipos presentan emisiones NOx muy inferiores a los 56 mg/kWh que exige la normativa europea.

Y ¿sabías que ya hay modelos que funcionan con hidrógeno, que no genera gases de efecto invernadero al combustionar? Se trata de las calderas H2 Ready con el sistema Hydrogen Plug-in. Están preparadas para trabajar con mezclas de gas natural e hidrógeno (80%-20%), un combustible que pronto podrá distribuirse.

Calderas de condensación para calefacción y ACS

Por muchos motivos, instalar una caldera de condensación es una decisión acertada. ¡Ya conoces las ventajas en cuanto a ahorro, confort y sostenibilidad! Lo siguiente es elegir modelo de entre una amplia variedad de potencias (de 24 a 45,6 kW).

Con tanta oferta, es fácil encontrar una que satisfaga de manera idónea la demanda de calefacción y ACS de casa. Aparte, puedes complementar la instalación con un cronotermostato wifi modulante que incremente la eficiencia y permita controlar la caldera en remoto.

¿Tienes ya claro que quieres este sistema de calefacción y agua caliente en tu hogar? Conoce la gama de calderas de gas disponible y haz de tu vivienda un lugar más eficiente.